FICHA
Título original: Amar en tiempos revueltos.
Título en España: Amar en tiempos revueltos.
Temporadas: 7 (1,716 episodios).
Duración episodio: 45 minutos.
Año: 2005-2012
Temática: Drama.
Subgénero: Postguerra.
Resumen: Historia de un amor protagonizado por dos personas que pertenecen a cada uno de los dos bandos en los que se rompió España durante la guerra civil y la postguerra.
Actores principales: Rodolfo Sancho, Ana Turpin, Pilar Bardem, Hector Colomé, Manuel Baqueiro, Itziar Miranda, Ana Otero, José Antonio Sayagués, Ana Villa, Iago García, Inma Cuesta, Luis Pérezagua, Elena Seguí, Ana Labordeta, Begoña Maestre, Manu Fullola, Pablo Viña, Marco Martínez, Jaime Menéndez, Joan Crosas, Paloma Tabasco, Cristóbal Suárez, Pilar Barrera, Luisa Gavasa, Elisa Garzón, Sara Casasnovas, Marta Calvó, Simón Andreu, Isabel Serrano, Joan Llaneras, Carlos García, Antonio Valero, Pablo Paz, Jorge Monje, Miguel Ángel Romo, Roberto Mori, Félix Gómez, María Cotiello, Carolina Bona, Lidia Plazuelos, Lola Marceli, Jesús Noguero, Ágata Lys, Eusebio Lázaro, Luis Hostalot, Nuria Fergó, Jordi Cadellans, Natalia Mateo, Rocío Madrid, Perla Cristal, Mariano Venancio, Bárbara Lennie, Nacho Fresneda, Israel Elejalde, Cayetana Guillén Cuervo, Pepa Pedroche, Natalia Millán, Juanjo Puigcorbé.
Lo mejor: sentó a las amas de casa y jubilados ante la TV durante siete años.
Lo peor: lentitud en el relato.
¿Cómo verlo?: Emitida por TVE, puede verse en el enlace que indicamos.
Puntuación: 6,5
Lo mínimo que puede decirse sobre AMAR EN TIEMPOS REVUELTOS
A las 16:15, las dos Españas pasan a ser la que inicia la jornada de tarde o bien la que se descansa ante el televisor. La primera está formada por afortunados que tienen trabajo, la segunda es un conglomerado de amas de casa que han acabado sus tareas, jubilados somnolientos y parados. Para este segundo grupo TVE elaboró este producto interminable, Amar en tiempos revueltos. Los tiempos revueltos eran los de la Guerra Civil y la postguerra, todo un período que abarca desde 1936 hasta 1957. Situar allí una historia de amor y desamor, era la forma más audaz de repasar lo que fueron aquellos tiempos sin recurrir a plúmbeas exposiciones históricas o a rigurosos análisis sociológicos.
El período de 21 años por los que se extiende la serie es en a primera temporada, los años más duros, 1936-1945, desde el principio de la Guerra Civil hasta el final de la Segunda Guerra Mundial. La segunda abarca e 1945 a 1948, los años de mayor inestabilidad en los que parecía que el bloqueo internacional acabaría con el franquismo. En la tercera, que nos lleva desde ese momento hasta el final del bloque a principios de los años 50, la situación de la gente, se empieza a crear empleo; luego, en la cuarta, España empezará a ingresar en foros internacionales y el régimen se estabiliza internacionalmente gracias a los acuerdos con los EEUU. Y, finalmente, en la última aparece sobre todo el fantasma de la guerra del Rif y la independencia de Marruecos.
Todos estos períodos son recorridos por distintos personajes que apenas hablan de política, pero cuya evolución personal y problemas ocupan el guión. Si el espectador está atento logrará entrever (o recordar) los episodios esenciales que en aquellas épocas estaban en la actualidad se perciben a través de ligerísimas pinceladas que en ocasiones se limitan a ser una frase, un anuncio, un titular de algún diario, la voz que suena en la radio. Poco más. A diferencia de Cuéntame cómo pasó, la actualidad ocupa un papel completamente secundario en Amar en tiempos revueltos. Como su titulo escenifica: lo primero es el amor y en un plano muy secundario se encuentra la descripción de los “tiempos difíciles”.
La media de audiencia indica que se trató de un fenómeno de masas (en unas horas en las que la audiencia global baja) con una audiencia en bruto de 2.503.000 espectadores y un share del 21,3%. En cada edición de los premios concedidos por distintos medios y organismos entre 2005 y 2012, la serie recibió un número notable de galardones que acreditan su calidad. El hecho de que se haya exportado a media Europa y incluso a las lejanas Corea del Sur, Filipinas e Irán, confirman la calidad de la serie.
Se trató, en efecto, de una serie muy bien ambientada y cuyo casting es extremadamente cuidado. Sin embargo el problema, el único problema de la serie, es que se prolongó durante demasiado tiempo y, para hacerlo, debió de ralentizar la trama. En algunos episodios no pasa absolutamente nada o pasa tan poco que es irrelevante. Ciertamente el producto estaba adaptado a un tipo de público muy concreto y a una hora poco adecuada para el thriller vertiginoso o la aventura hiperactiva(podía darse el caso que el espectador se durmiera por algunos minutos sin perder el hilo narrativo); la parsimonia de la serie era tal que si uno no correspondía a ese tipo de audiencia, la serie le resultaba completamente insoportable.