FICHA
Título original: Miss Sherlock
Título en España: Miss Sherlock
Temporadas: 1 (8 episodios)
Duración episodio: 45 minutos.
Año: 2018
Temática: intriga
Subgénero: investigación
Resumen: Una mujer detective participa en las investigaciones de los crímenes más misteriosos que se suceden en Tokio y que la policía no logra resolver. Está acompañada por una doctora que completa el duo creado por Sir Arthur Conan Doyle: Sherlock Holes y el doctor Watson en versión femenina y japonesa
Actores: Yuko Takeuchi, Shihiri Kanjiya, Kenichi Takito, Tomoya Nakaruma, Yukiyoshi Ozawa, Corri Ito
Lo mejor: La originalidad del intento: en Japón y en sexo femenino.
Lo peor: No alcanza a las series inglesa (Sherlock), ni norteamericana (Elementary).
Lo más curioso: La serie ha sido desarrollada por HULU y HBO-Asia.
¿Cómo verlo?: Es emitida en España por HBO. Puede encontrarse en emule
Puntuación: 6
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Lo menos que puede decirse sobre MISS SHERLOCK
Las adaptaciones de las obras de Sin Arthur Conan Doyle parecen a la orden del día. Se han hecho ya tantas versiones que resulta ocioso enumerarlas. Unas son mejores, otras peores, pero ninguna ha logrado superar ni la actuación, ni la escenografía, ni las adaptaciones realizadas en los años 80 y 90 en el ciclo de aventuras del personaje encarnado por Jeremy Brett. Se han hecho reinterpretaciones del personaje en EEUU (Elementary) y en el Reino Unido (Sherlock). Ahora quedaba que en otros horizontes sufriera, no solamente una adaptación al siglo XXI, sino también al panorama etno-cultural de la zona y, finalmente, ya que estamos en un año de feminismo desatado, alguien juzgó que no bastaba con instalar a Sherlock y a su inseparable Watson, en el Japón, sino que era necesario también, cambiarle el sexo. Todo esto ha dado como resultado la serie Miss Sherlock, estrenada el 1 de diciembre en HBO-España.
El cine japonés nos suele mostrar a un país en vanguardia de la innovación tecnológica, pero también efecto a sus tradiciones seculares. Los japoneses son muy particulares y no siempre sus intentos de asimilar las formas occidentales han dado los mejores resultados. Japón es, hoy por hoy, el país en el que la informática y los videojuegos han causado más destrozos entre los jóvenes y en donde las páginas de sexo han abierto el camino a las parafilias más retorcidas. No todas las adaptaciones, así pues, se han saldado con un éxito notorio. Y otro tanto ha ocurrido con esta serie que podemos considerar, en gran medida, frustrada.
Uno de los rasgos culturales de los japoneses consiste en no llorar en público por fuerte que sea la desgracia. Sin embargo, en esta serie, los llantos son frecuentes y fronterizos al ataque de nervios. Las normas de cortesía ritual son muy elaboradas y las inclinaciones de cabeza una muestra de respeto, incluso para los miembros de la yakuza cuando van a asesinar a alguien: sin embargo, aquí, “Miss Sherlock” actúa con una falta de tacto y una mala educación propia de poligoneras de arrabal de las zonas más degradadas de Europa. El policía equivalente al “inspector Lestrade” de la serie originaria, se convierte aquí en un personaje excéntrico con el pelo que parece un nido de golondrinas y su ayudante, un tal “Shibata” (pronunciado, literalmente, “Chivata”) un tontorrón de menos luces todavía. Para colmo, en la serie aparecen en muchos momentos, toques “gore”: autopsias recreadas con lujo de detalles, las misma protagonista introduciendo las manos en el agujero de un cadáver para buscar pruebas, efusión de vísceras desparramadas en los lugares de los crímenes y toda una serie de elementos que están más próximos al cine de terror que a los relatos del pobre Conan Doyle.
Tampoco puede decirse que los guiones hayan sido particularmente afortunados y resulten creíbles. Las deducciones propias del personaje literario, aparecen demasiado forzadas y poco verosímiles. En fin, no puede decirse que los guionistas vayan a ser candidatos de los BAFTA o de cualquier otro premio a su tarea. En cuanto a las interpretaciones tienen algo de falso: actores que no se adaptan a personajes (ni “Miss Sherlock”, ni la “doctora Watson” están particularmente sembrados, ni creíbles en sus roles, ni, como hemos dicho antes, las escenas de llanto tienen nada que ver con la cultura japonesa: y los actores, en esos momentos, tienden a sobreactuar).
Evidentemente, la serie se ha realizado con unos estándares que permitan difundirla en países occidentales. Pero, cabría decir, que se han pasado de frenada y el resultado ha sido una serie, en buena medida, “gore”, con formato de serie policial “procidentamental”, elementos extraídos del CSI, deducciones del género “Esto es una colilla, aquí han fumado”, pequeños toques irónicos, personajes “topificados” y, finalmente, alejamiento de lo que es la cultura japonesa.
En su conjunto, el resultado es modesto. Resultará “inolvidable” porque, desde luego, es la primera vez que vemos a la figura del detective cambiado el sexo y orientalizado, pero ahí empieza y termina todo el mérito y el impacto. A diferencia de Netflix, en cuyo catálogo existe todo un submundo de series elaboradas en el sudeste asiático, Corea, etc,, el catálogo de HBO carecía de este tipo de productos de muy difícil penetración en el ámbito occidental. Con este co-producción entre HULU y HBO han intentado comercializar un producto similar más adaptado a los gustos de nuestras latitudes. El resultado no ha sido particularmente brillante, aunque la serie puede verse, resulta curiosa, nos sorprendente algunos giros narrativos y, en especial, si uno es consumidor compulsivo de todas las variaciones sobre el personaje de Holmes, esta serie puede entretenerle, incluso.
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