FICHA

Título original:  Desde el mañana
Título en España: Desde el mañana
Temporadas: 1 (8 episodios)
Duración episodio: 44 minutos.
Año: 2024
Temática: Ciencia Ficción
Subgénero: Drama
Resumen: Una familia se muda a un nuevo chalet. En la despensa descubren un mineral que genera visiones del futuro. La protagonista ve su próxima muerte y la de su hija, con lo que intentará por todos los medios, cambiar ese futuro generado por un mineral, aparentemente, extraterrestre.
Actores: Marta Gazas, Álex González, Ramón Barea, Pablo Derqui, Cristina Marcos, Ana Fernández, Nuria Herrero, Jaime Zatarain, Denisse Peña, Clara López, Amets Otxoa, Pino Montesdeoca, Gabriel Guevara,
Lo mejor: la historia, está bien contada.
Lo peor: el argumento es inconexo, repleto de cabos sueltos, mal rematado y con diálogos pésimos.
¿Cómo verlo?: Es emitida en España por Disney+  desde el 12 de junio de 2024.

Puntuación: 6

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Lo menos que puede decirse sobre  DESDE EL MAÑANA

Desastre completo. Se salva por algunas buenas actuaciones (Marta Hazas, Ramón Barea, Pablo Derqui…), pero habría que someter a juicio a los guionistas y, sobre todo, a los controles de calidad de Disney, para que una serie tan absolutamente inconexa, haya podido emitirse en una plataforma de pago. Y lo peor de todo, es que, inicialmente, la serie suscita esperanzas, especialmente por las interpretaciones. Pero pronto, todo se apaga. A partir del tercer episodio se percibe con claridad que el argumento resulta tan absolutamente increíble y embrollado que ningún guionista puede aportar un final redondo.

Como digo, la cosa empieza bien: un niño, hace sesenta años, ve una luz en el cielo, es un meteorito que viene de otro planeta, cae cerca suyo. Está compuesto por un mineral extraterrestre que permite ver flashes del futuro. Décadas después, aquel niño, convertido en un empresario de éxito y con una familia compuesta por dos hijos y varios nietos, vive retirado. Sin embargo, cuando su hija compra un chalet nuevo, encuentra en la despensa unas baldosas levantadas. Allí hay rastros de aquel mineral. La mujer lo toca e inmediatamente ve cosas que están a punto de pasar, siempre acompañadas por la velada presencia de su madre ya fallecida. Verá a su marido con otra mujer (lo que acarreará un divorcio ipso facto), verá la muerte de su hija y verá su propia muerte… La hija, por cierto, está envuelta en las actividades de su novio, un ecologista que cree que en la empresa levantada por el padre es el foco de una siniestra conspiración que le ha costado la vida a su propio padre…

En fin, el argumento es completamente inconexo y puede decirse que, a partir del capítulo segundo, la serie navega sin rumbo fijo y cualquier esperanza a interés que pudiera albergarse resulta disipado. Se sigue viendo la serie, más que nada, por las actuaciones de los protagonistas, que en general, están muy por encima del guion. Nada queda explicado: ni qué hacer con el mineral, ni a qué se dedica la empresa creada por el abuelo, ni cómo escapan la protagonista y su hija de la muerte, nada. Es difícil que una serie decepcione a todo el público que había depositado esperanzas en ella. Pues bien, esta lo consigue sin paliativos.

Seamos realistas: los guionistas no han elaborado el argumento de una miniserie, más bien se han dedicado en sus “brain storming” a crear un cuento para niños en la que todos esperan la coronación con el consabido “y fueron felices y comieron perdices”. Porque así es, en definitiva, el final. Ahora bien, vale la pena consultar la página de Wikipedia dedicada a esta serie, para advertir que el creado es Deniel Écija (que se ha lucido, por cierto), pero no menos lamentables han estado los ¡siete guionistas! que han participado en el disparate y los ¡cuatro directores!

¿Tanto cuesta? Que profesionales de la guionización y de la dirección hagan bien su trabajo. No pedimos series de Oscar, sino solamente productos llevaderos de los que no tengamos que avergonzarnos al decir que son de “producción española”. Tampoco es mucho. Y en cuanto a Disney+, ya les vale cobrar un abono para servir productos sin el más mínimo control de calidad.

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