FICHA
Título original: And then there were none
Título en España: Los 10 negritos
Temporadas: 1 (3 episodios)
Duración episodio: 60 minutos.
Año: 2015
Temática: crímenes
Subgénero: intriga
Resumen: Miniserie basada en la novela más famosa de Agatha Christie. Diez desconocidos coinciden en una isla completamente desierta. Todos ellos tienen alguna muerte en su conciencia y todos ellos no se conocen entre sí. Poco a poco, uno a uno, van siendo asesinados, desapareciendo con cada muerte una de las figuras que decoran la mesa del comedor. Ignoran quién les ha reunido en aquel lugar inhóspito y luego, empiezan a sospechas que uno de los presentes es el asesino.
Actores: Maeve Dermody, Charles Dance, Toby Stephens, Burn Gorman, Sam Neill, Paul Chahidi, Miranda Richardson, Charlie Russell, Tom Clegg, Catherine Bailey, Noah Taylor, Ben Deery, Christopher Hatherall, Douglas Booth, Harley Gallacher, Anna Maxwell Martin, Aidan Turner, Rob Heaps, Joseph Prowen
Lo mejor: la miniserie ha recogido perfectamente el espíritu de la obra de la autora británica.
Lo peor: el arranque es algo lento.
Lo más curioso: se ha mantenido la traducción tradicional de esta novela, a pesar de que no aparecen negritos.
¿Cómo verlo?: Fue estrenada por el canal Nova de Atresmedia en junio de 2019, después de haber pasado por La Sexta. Puede encontrarse mediante programas de intercambio de archivos.
Puntuación: 9
PROMO (en inglés)
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PROMO (entrevista a protagonistas, en inglés)
PROMO (en inglés)
INTRO
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WEB OFICIAL (Nova)
WEB OFICIAL (BBC)
Lo menos que puede decirse sobre AND THEN THERE WERE NONE
Miniserie absolutamente recomendable, no solamente para seguidores de Agatha Christie, sino, sobre todo, para amantes de las miniseries inglesas. Fue una miniserie que abrió el camino a El Misterio de la Guía de Ferrocarriles (The ABC Murders) estrenada en 2019. En ambos casos, la crítica que puede realizarse es muy parecida: un elenco de actores extraordinarios, un modelo de producción extremadamente cuidado y un exquisito interés en recuperar el espíritu de la obra originaria escrito por la siempre inquietante autora británica.
Se trata de una producción sin fisuras en la que resulta difícil encontrar alguna objeción. El clima de los años 30 es reconstruido mediante una serie de pinceladas y de frases dispersas en los 180 minutos de la serie y el casting ha reunido a algunos de los actores de carácter más “poderosos” de la escena británica: el mayordomo es el inquietante Noah Taylor (Creeped Out), el “general Gordon” es Sam Neill, Miranda Richardson (Goodmens, Víbora Negra) es Emily Brent, Toby Stephens (Espías de Cambridge, Black Sails), el “Doctor Amstrong”, Anna Maxwell Martin (El círculo de Bletcheley, Crónicas de Frankenstein, Accused) es la esposa del mayordomo, el misterioso Burn Gorman (Forever, Stan Lee’s Lucky Man) “el detectiva Blore”, el veterano Charles Dance (Secret State, Los oscuros comienzos de Sherlock Homes, La viuda), etc, etc. Un casting, sino completamente compuesto por primeras figuras, si en casi su totalidad, hecho con actores carismáticos y con “presencia escénica”.
La serie se inicia con el encuentro de los desconocidos que han sido invitados a pasar unos días en la Isla del Soldado, un lugar remoto y prácticamente inaccesible. Se trata de gentes procedentes de muy distintos horizontes que no se conocen entre sí y que tienen muy poco que ver unos con otros. La casa está a cargo de un matrimonio formado por el mayordomo y la cocinera. Todos tienen en común -y pronto se entenderán de ello mediante un disco microsurco- el ser responsables de la muerte de alguien. Pronto empezará el desfile de víctimas y la desaparición de una de las figuras que lucen en la mesa del comedor. Cada crimen estará vinculado a una estrofa de la canción infantil. El desenlace final es inesperado y sorprendente, incluso para los que ya han visto versiones anteriores (es la novela de Agatha Christie más veces llevada al cine) o leído la novela. En el fondo, es una reflexión sobre la culpa y el arrepentimiento: los muertos que están en el armario siguen allí por mucho que no lo abramos y, tarde o temprano, terminan pasando factura. Tal es el mensaje y el leit-motiv de la novela.
Las primeras escenas no dejan prever lo que vamos a ver en los 140 minutos siguientes. Los flashbacks ayudan a situar a cada uno de los personajes. Y al acabar los créditos del último episodio, los espectadores quedarán satisfechos por lo que han visto. Esta renovación del interés por la obra de Agatha Christie viene a rebufo de la serie Poirot que había dejado el listón muy alto. Afortunadamente, los remakes que se han producido con posterioridad, han intentado superar aquel modelo canónico. Unos lo han logrado (las dos miniseries estrenadas en 2019 y en 2015) y otros se han quedado cerca (Asesinato en el Orient Express, 2017).
Recomendable para seguidores de Agatha Christie, para admiradores de las miniseries producidas por la BBC y para los que quieren pasan 180 minutos tan inquietantes como reconfortantes ante el plasma.
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Realmente no me pareció tan buena como para un 9… y me pareció muy predecible… además la motivación del asesino me pareció muy «falsa». Hay muchas cosas que eran impredecibles y se le arruinaba todo el plan…
Pero es para verla…
SPOILER
¿No podían leer el poema completo para saber que estaba por pasar y como iba a morir cada uno? ¿No podían esconder las figuras?
FIN SPOILER
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