FICHA
Título original: Nowhere Boys
Título en España: Chicos perdidos
Temporadas: 3 (39 episodios)
Duración episodio: 25 minutos.
Año: 2013-8
Temática: Aventuras
Subgénero: Ciencia Ficción
Resumen: Cuatro adolescentes, cada uno con unas características propias,se van de excursión con la escuela y se pierden en el bosque. Cuando retornan a su hogar se encuentran con que nadie los reconoce y todo ha cambiado para ellos: han penetrado en un mundo paralelo en el que no existen. Intentan adaptarse y buscan la forma para regresar al mundo al que pertenecen, para ello descubren la magia de los amuletos, así como a enemigos diabólicos
Actores: Dougie Baldwin, Joel Lok, Rahart Adams, Matt Testro, Darci McDonald, Michala Banas, Nicholas Coghlan, TamalaShelton, Sean Rees-Wemyss, LibbyTanner, Zelman Cressey Gladwin, Logan Phillips, Damien Richardson, Jesse Williams, Ben Anderson, Cecilia Tan, Daniel DiGiovanni, Heidi Arena, NicoleNabout, Clare Dea, Lester Ellis Jr., Victoria Thaine, Sarah Roberts, Pearl Tan, Michelle Gerster
Lo mejor: Una serie juvenil conperfiles convincentes.
Lopeor: Cierto infantilismo en alguna de las situaciones.
Lo más curioso: La serie fue creada por Tony Ayres y estrenada en supaís de origen -Australia- en 2013.
¿Cómoverlo?: Es emitida en España por Netflix. Puede encontrarse enemule
Puntuación: 7
PROMO (en inglés)
PROMO (en inglés)
PROMO (en inglés)
VER SERIE (Netflix)
DESCARGA TORRENT
WEB OFICIAL (ABCNet, en inglés)
WEB OFICIAL (Netflix)
Lo menos que puede decirse sobre CHICOS PERDIDOS
Las series norteamericanas “de institutos” suelen ser ramplonas, aburridas incluso para jóvenes europeos y repletas de mensajes subliminales sobre las excelencias dela juventud norteamericana, de sus hábitos competitivos y de sus costumbre sdesenfadadas. En realidad, no describen a los jóvenes norteamericanos tal cual son sino con el prisma deformante de cómo les gustaría ser y verse. Tienen cierto éxito en los EEUU, pero son inexportables o su éxito es mucho menor fuera de su tierra natal. Otras series elaboradas fuera de los EEUU cometen el error de imitar a las producciones hollywoodienses, alcanzando un éxito limitado entre los jóvenes. Es lo habitual. Así pues, hay que ponerse en guardia cuando vemos alguna serie de televisión “de institutos” o de “historias de adolescentes” porque, habitualmente son irrelevantes. Esta era la opinión que teníamos cuando abordamos el visionado de Chicos perdidos, cuyo título, a pesar de su concreción, no dejaba intuir su contenido. Debemos reconocer que esta serie, elaborada en Australia, está muy por encima de cualquier otra de su mismo género.
Los protagonistas de la serie son cuatro jóvenes -el empollón, el guaperas, el freaky y el deportista- que encontramos en cualquier centro de estudios.Ninguno de ellos se lleva completamente bien con los otros y, en realidad, en las aulas apenas han tenido contacto. Sin embargo, acompañan al resto de alumnos a una excursión campestre en el curso de la cual, los cuatro, destinados por el profesor al mismo grupo, se pierden, parecen perseguidos por algo similar a un tornado, caen por una ladera y cuando llegan al final, encuentran el camino de retorno a su hogar. Al llegar cada uno de ellos a donde vivían habitualmente, se encuentran con que todo el exactamente igual a cómo lo habían dejado, pero nadie les reconoce ni como sus hijos, ni como sus hermanos, ni siquiera como sus alumnos: entienden que han entrado en una dimensión paralela y, a partir de ahí, todos sus esfuerzos se concentran en cómo regresar al mundo en el que tienen un lugar. Tal es la temática de la serie que está desglosada en tres temporadas de once episodios cada una.
Lo primero que hay que decir es que los arquetipos juveniles de los protagonistas (con sus correspondientes compañeras que ya no les reconocen en la dimensión a la que se han precipitado) corresponden a modelos realmente existentes. La historia se convierte en una perífrasis simbólica de los jóvenes adolescentes a la búsqueda de su identidad y de elementos en los que puedan arraigar su vida. Pero, esta serie, estrenada con gran éxito en Australia y que ha llegado a España,discretamente, sin publicidad alguna, incluida en el catálogo de Netflix, es,no solamente una reflexión sobre la condición de adolescente en la modernidad,sino también una serie de aventuras.
Pronto, los jóvenes descubren que la única forma para regresar a su dimensión es mediante “la magia”: encontrarán en su nueva dimensión una “tienda esotérica” en la que se harán con un talismán que solamente resulta efectivo cuando se encuentran los cuatro protagonistas juntos. Es el guiño para indicarnos “conciencia común” y la necesidad de integración de los que son de edades similares en un mismo grupo,por encima de los individualismos preexistentes.
Actores aceptables, desconocidos por supuesto en España; montaje ágil, fotografía profesional, sin abusar de efectos especiales, diálogos cortos y suficientes para pintar las personalidades de los protagonistas y sus problemas y una serie de gags dispersos en cada episodio que introducen elementos cómicos que se unen a la aventura y a la descripción de la condición juvenil. Quizás en algún momento, la imaginación haya sido excesivamente desbordante en lo relativo a la magia y a los adversarios satánicos de los adolescentes.
Una buena serie que gustará a jóvenes e incluso supondrá una refrescante oportunidad para los no tan jóvenes para que conozcan las personalidades y los problemas de los hijos.
(SI ESTA CRÍTICA LE HA SERVIDO PARA ALGO O LE HA AYUDADO EN ALGO, PULSE LA PUBLICIDAD QUE ACOMPAÑA Y QUE NOS AYUDA A MANTENER LA WEB. GRACIAS).