FICHA
Título original: Star Trek: Voyager
Título en España: Star Trek: Voyager
Temporadas: 7 (172 episodios)
Duración episodio: 45 minutos.
Año: 1995-2001
Temática: Ciencia Ficción.
Subgénero: Aventuras.
Resumen: En el Cuadrante Delta del espacio estelar, la comandante de la nave Voyager que ha perdido a parte de su tripulación se enfrente a oficiales rebeldes miembros del Maquis, para intentar volver a la tierra en un viaje de retorno que implica enfrentarse con razas rivales y peligros desconocidos.
Protagonistas: Kate Mulgrew, Robert Beltran, Roxann Dawson, Ethan Phillips, Robert Picardo, Robert Duncan McNeill, Garrett Wang, Tarik Ergin, Jennifer Lien, Majel Barrett, Dwight Schultz, Jeri Ryan, Tim Russ, Scarlett Pomers, Josh Clark, Simon Billig, Jessica Collins, Alexander Enberg, Nancy Hower.
Lo mejor: los espectadores se sorprendieron de que las riendas de la nave estuvieran guiadas por la mano firme de una mujer.
Lo peor: la serie es muy desigual en su desarrollo.
Lo más curioso: Parece inspirada en los Viajes de Ulises y en el tema del retorno a la tierra natal.
¿Cómo verlo?: puede “bajarse” mediante programas P2P en versión original. Algunos episodios están presentes en youTube. Está al a venta en DVD.
Puntuación: 6,5
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Lo mínimo que puede decirse sobre STAR TREK: VOYAGER
La originalidad de este producto de la saga Star Trek radica en su planteamiento de partida: la nave USS Voyager está buscando en lugar remoto del espacio a la nave Maquis. Un misterioso personaje –el Guardián- consigue llevar a la nave de rescate al mismo “Cuadrante Delta” al que ha enviado a la anterior, Maquis. En el curso de las peripecias iniciales, mueren varios miembros de la tripulación y se producen distintos ataques por parte de razas alienígenas. Cuando, finalmente, las tribulaciones supervivientes de ambas naves se encuentran, afrontan juntas el retorno a la base… ¡situada a 75 años luz de distancia! Esto es a 70 años a una velocidad algo superior a la de la luz. La serie trata, esencialmente, sobre ese retorno y sobre los riesgos que corren los miembros de la tripulación del USS Voyager.
La serie contó con las más avanzadas técnicas de diseño en 3D y de efectos especiales por ordenador. Se encuentra muy alejada del amateurismo, e incluso, del primitivismo de la serie originaria concebida y realizada cuarenta años antes. Se trata, en realidad, de dos mundos completamente diferentes que tienen muy pocas cosas en común. El espíritu de la serie también es completamente diferente: los tripulantes están constantemente amenazados por riesgos exteriores a ellos, e incluso entre ellos mismos, la armonía no es siempre buena. La serie responde, de nuevo, a un momento concreto en la historia de los EEUU: la etapa del “fin de la historia” teorizada por Francis Fukuyama no parece concretarse: de hecho, los peligros que acechan a la nave son muy superiores a los que otras generaciones de Star Trek han tenido que afrontar: y lo que es peor, están aislados de la Tierra setenta años luz… Sería imposible situar mejor el estado de ánimo del pueblo norteamericano en aquel momento: el presidente Clinton ha intervenido en los lugares más distantes del globo: en África sus enviados han debido reembarcar a prisa y corriendo después de que bandas de sudaneses intoxicados por la droga, literalmente, los derrotaran; claro está que los bombardeos de la OTAN sobre Yugoslavia han resarcido a los EEUU… pero también le han creado nuevos enemigos e incluso en la Federación Rusia, el oso se ha despertado de nuevo. Y ya en el horizonte se perciben los primeros sobresaltos del “terrorismo internacional”.
Todos estos elementos de contexto histórico están tratados de una manera “épica”: lo que los guionistas nos están presentando son una adaptación de La Odisea homérica y de los viajes de Ulises. En el puente de mando no se encuentra un astuto héroe griego, sino la figura de la mater nutricia: una mujer que ejerce de capitana y madre de la tripulación, la “comandante Kathryn Janevway” (Kate Mulgrew), de pura raza humana, secundada por “Chakotay” (Robert Beltran), antiguo renegado de la nave Maquis y originariamente nativo norteamericano atormentado por su pasado y por la fatalidad de su destino. “Tuvok” (Tim Russ), en cambio, es vulcaniano de pura raza y ejerce como jefe de seguridad de la nave, a diferencia de la “teniente jefa de ingeniería”, “B’Elanna Torres” (Roxana Dawson), humana por parte de padre y klingon por parte de madre… A estos se unen miembros de otras razas (tanianos, borgs, talaxianos…) e incluso un holograma que ejerce de “oficial médico”.
Se trata de una serie de aventuras clásicas, ambientada en el espacio por pura fidelidad a la franquicia Star Trek. No abundan ni explicaciones científicas, ni planteamientos habituales en la ciencia ficción: simplemente, el elemento dominante es la aventura. El problema de la serie es que los episodios resultan muy desiguales unos de otros y que el esfuerzo de guionización parce haberse relajado en beneficio del recurso a los efectos especiales. Así mismo, el hecho de que la protagonista sea una mujer parece imponer un mayor intimismo a los personajes y más atención hacia sus vidas y andanzas privadas. La serie es muy apreciada por los trekkies que la consideran “innovadora” en relación a productos anteriores de la franquicia. Pero no existe unanimidad al respecto: fuera del entorno trekkie de estricta observancia, el resto del público tiene tendencia a considerar Star Trek: Voyager como la más floja de la saga.